Título Original: Days of Blood and Starlight
Autor/a: Laini Taylor
Páginas: 516
Editorial: Alfaguara
Sinopsis:
La estudiante de arte e hija y aprendiz de quimera, Karou, finalmente ha encontrado las respuestas que siempre buscó. Ahora sabe quién es –y sobre todo qué es. Pero este conocimiento ha venido acompañado por otra verdad, la que daría todo por borrar: Ella amó al enemigo y él la traicionó, y el mundo padeció por ello.
En esta impactante secuela a la aclamada novela Hija de humo y hueso, Karou tendrá que decidir qué tan lejos llegará para vengar a su gente. Repleta de desamores y belleza, de secretos y elecciones imposibles, Días de sangre y resplandor ubica a Karou y Akiva en bandos opuestos de una legendaria guerra que vuelve a tomar fuerza. Mientras Karou y sus aliados construyen un ejército monstuoso en un territorio de polvo y luz de estrellas, Akiva libra una batalla completamente diferente: una lucha por redimirse. Por mantener la esperanza. Pero ¿podrá recuperarse algún tipo de esperanza de las cenizas de su sueño roto?
(ALERTA: Puede contener spoilers del primer libro)
Apenas terminé de leer el primer libro, empecé con este. Era imposible resistirse a ese final desgarrador y esperar a saber que ocurriría luego del tan suspensivo "Continuará..."
En sí, esta segunda parte tiene mucha más acción que la anterior. Nos encontramos con nuevos personajes (o algunos nombrados en el libro anterior, pero de escasa información), un nuevo ambiente y también sentimientos.
En el primer libro, nos habíamos topado con la búsqueda de Karou para descubrir quién era en realidad, y el trágico amor entre ella y el serafín. Si ustedes se habían esperado el típico final de "...y vivieron felices para siempre", estaban completamente equivocados. Akiva había cometido un gran, gran error: hizo masacrar a la familia de Karou.
Ahora, ella está completamente sola, enfocada en su nueva misión: vengar a aquellos monstruos que la criaron desde que era tan solo un bebé, o mejor dicho, desde siempre. Con la verdad en sus manos y capaz de poder controlar todo lo que se le plazca a su alrededor, pone en marcha su plan y, tal cual aprendió de Brimstone, comienza a recolectar aquellas almas quimeras perdidas en batalla para traerlos de vuelta a la vida.
Ahora, ella está completamente sola, enfocada en su nueva misión: vengar a aquellos monstruos que la criaron desde que era tan solo un bebé, o mejor dicho, desde siempre. Con la verdad en sus manos y capaz de poder controlar todo lo que se le plazca a su alrededor, pone en marcha su plan y, tal cual aprendió de Brimstone, comienza a recolectar aquellas almas quimeras perdidas en batalla para traerlos de vuelta a la vida.
Acá nos topamos con el primer problema.
Thiago, el lobo blanco. Tuvimos la suerte de conocer un poco a este secundario cuando nos remontamos al pasado de Karou. Pudimos ver las atrocidades que cometió, como torturó al ángel y la manera en que hizo pagar a la Kirin por haber tenido un romance con el enemigo. Desde ese entonces, desciframos la personalidad de este nuevo obstáculo. Él quiere y cree poder controlarlo absolutamente todo, y, así es. Excepto a Karou.
A pesar de que Karou sabe la verdad, y vio todo lo que le hizo este monstruo (literal), no tiene opción. Él, es el líder. Ella, la traidora.
Comienza a revivir soldados, los que Thiago le ordena, para crear el ejército quimérico.
